#MadridEsJoven: la juventud inspiradora que hace de Madrid una ciudad con grandes valores.

9/6/2023

El pasado jueves día 8 tuve la suerte de ser la “madrina” de la II Gala #MadridEsJoven, programa del Departamento de Madrid Juventud, Ayuntamiento de Madrid.

‍Enhorabuena a todos los profesionales y recursos delque informan,apoyan, orientan y educan a niños, adolescentes y jóvenes, especialmente a los de colectivos más vulnerables. Y enhorabuena a todos los centros educativos, docentes y educadores/as que les motivan cada día para no dejar de aprender, de descubrir y de compartir.

Porque sí, sin duda, si algo tenemos que primar y empoderar hoy día es a la juventud.

 

Para los que no me conocéis, contaros que llevo casi 10 años trabajando en el Servicio dePrevención de Adicciones de Madrid Salud, Servicio PAD, y más de 10 como profesora de Ciber comunicación y Nuevos Medios en la UCJC. Esto me ha permitido estar durante todos estos años aprendiendo sobre adolescentes y jóvenes y de ellos y ellas, y muy especialmente, en relación con el mundo de la tecnología.

 

Por eso, en este presente tecnológico e hiperconectado en el que vivimos actualmente, hay 2mantras que se vienen repitiendo durante los últimos años y que suelen protagonizar los titulares de los medios de comunicación contra los que intento luchar desde la información y la divulgación científica:

 

Por un lado,“que los y las jóvenes de hoy día son más vagos, más desinformados, menos listos y menos pacientes que generaciones anteriores”; y, por otro, “que la tecnología es la causante de todos sus males”.

 

Respecto a la primera de las afirmaciones ni qué decir que veo cada día ejemplos de personas adolescentes y jóvenes creativas, inspiradoras, emprendedoras, motivadas y llenas de ganas de hacer y ofrecer.

 

Pero como citan las célebres frases: “Los jóvenes de hoy aman el lujo, tienen manías y desprecian la autoridad. Responden a sus padres, cruzan las piernas y tiranizan a sus maestros” o la de “¿Qué les pasa a nuestros jóvenes? No respetan a sus mayores, desobedecen a sus padres, ignoran las leyes, su moralidad decae”. Que, aunque no son ni de Sócrates ni de Platón como se les suele atribuir, sino de KennethJohn Freeman, un estudiante de Cambridge que las escribió en 1907, lo normal es que los adultos tendamos a despreciar lo que ignoramos y pensemos que siempre lo pasado fue mejor…

 

Sin duda, adolescentes y jóvenes ya no leen libros como antes, ni llaman por teléfono ni comparan la prensa o ven la televisión. Se educan de otra manera, se informan de otra manera, se divierten de otra manera y socializan de otra manera.

 

Habrá cosas que nos gusten más y otras menos, pero como padres y madres y docentes no podemos vivir anclados en la nostalgia de nuestro pasado. Debemos formales y educarles para el presente y futuro que les ha tocado vivir, no para el que vivimos nosotros…

 

En cuanto a la segunda, sabemos que el mal uso de la tecnología, y esto se refiere tanto al desconocimiento de las pautas básicas de ciberseguridad para proteger nuestra seguridad y privacidad en la red, como al uso abusivo de las pantallas, hace que surjan riesgos que pueden causar daños en la salud física y emocional delos menores. Pero la solución no es prohibir o censurar, nunca lo es.

 

Debemos trabajarla prevención y educar en digital, de una manera normalizada y transversal implicando a todos los agentes que formamos parte de la vida de los/las menores y esto es: las familias, los centros escolares, educadores/as, las instituciones y las propias plataformas.

 

Pero en este camino hay diferentes opiniones, corrientes y metodologías, etc. como es lógico y normal en cuanto a la educación y salud de los y las menores. En la educación de nuestros hijos no hay negro o blanco. Hay sentido común, y este se cultiva con experiencia, lectura, diálogo, debate, reflexión crítica y ciencia.

 

Así podrán adquirir las competencias digitales básicas que les permitan dejar de ser generaciones ‘huérfanas digitales’ para convertirse en ‘competentes’ en las tecnologías que van a determinar su futuro y el de toda la sociedad.

 

Como dijo el entrenador de baloncesto John Wooden: «La gente joven necesita modelos, no críticos». Y para esto lo mejor es conversar, hablar mucho con ellos, en casa, en el aula, abordar los riesgos de la adolescencia, pero también las oportunidades; en pocas palabras, convertirnos en los mejores referentes para nuestros hijos y alumnado, con y sin tecnología.

 

Muchísimas gracias por formar parte de ello. Muchísimas a gracias a todos por vuestro trabajo.